EL CASTILLO, AMARILLO.
Gran trabajo del R5F1Team, en un espectacular arranque de la temporada 2009.
Ya avisaban que el amarillo 2009 daría grandes sorpresas, y así fue. Esta vez Miguel-R no se fue a la cuneta y pudo aprovechar la ausencia del Kartman y los problemas mecánicos de los principales rivales para llevarse a la saca su primera victoria. Sumando los puntos obtenidos por su compañero Capi el Emparedado, los amarillos arrancan en cabeza en el Campeonato de Equipos.
Después de unos meses de climatología nefasta, amaneció un fin de semana espectacular, tanto que parecía que en lugar de en el Gran Premio de Invierno, estábamos en el de verano. El Tiempo nos respeta, porque nuestro Campeonato es respetable, además de justo y necesario. El tema organizativo, eso sí, tuvo sus lagunas, que se fueron solventando sobre la marcha. Del “tenemos que empezar a las 10:30, sí o sí, porque esto tiene que estar terminado a las 12:00”, pasamos a “empezamos cuando queráis, y ya os iremos colando entre la gente”. Los equipos amarillo, rosa y rojo llegaron tarde, pero poco, y no hubo problema. Lo triste fue lo del equipo debutante Babiera Motor, que en un alarde de ingenuidad cogieron la carretera pensando que el camino al Castillo de las Guardas estaría indicado desde Sevilla. Finalmente, llegaron una hora y media tarde, cuando ya se había corrido la primera manga.
Como, sin el Babiera Motor, la Parrilla tenía sólo diez pilotos, se decidió correr todos juntos por el sistema de dos mangas puntuables. Nuevamente, normas nuevas. Tenemos más cambios de reglas que la Fórmula 1. Fue arriesgado, pero no salió mal, sino todo lo contrario. El sistema fue el siguiente:
Una Ronda libre para hacer marcas. El mejor tiempo obtenía 4 puntos extra, el segundo, dos, y el tercero, uno. Una primera manga saliendo en parrilla en orden inverso a los tiempos obtenidos. El mejor tiempo de esta manga obtenía un punto extra. Una segunda manga saliendo en parrilla en orden inverso a los puestos de la primera manga. El mejor tiempo de esta manga también obtenía un punto extra. Finalmente se suman los puntos y se obtiene la Clasificación definitiva.
Este sistema prima absolutamente el espectáculo y la diversión. Todo puntúa: las marcas y los puestos. Y haciendo salir desde atrás a los que van más rápido, se involucra a todo el mundo en la pelea. El resultado, un carrerón.
Tras 11 minutos dando vueltas buscando esas manos mágicas, Miguel-R obtuvo su primera pole (31:45), arrebatándosela por centésimas a Dai (31:49). También bajaron de los 32’’ Mato (31:56), Capi (31:84) y Edu (31:91). Menos rápidos estuvieron Pedrós (33:04), Lamas (33:43), Alex (33:85), Chechu (34:49), que reventó un neumático, y Casi (35:01). Miguel-R, al ver el tiempo creyó haber batido el record de la pista, y así se reflejó en el acta, pero no: el record seguía en poder de Dai con los 31:36 del año pasado.
Al ver que el Babiera Motor no llegaba y que en cambio sí aparecían nuevos grupos para alquilar la pista, se decidió arrancar con la primera manga. En esta ronda los pilotos usaban el mismo kart y, como se ha dicho, salían en orden inverso a las marcas. La salida se preveía de alto riesgo, pero, con sus más y sus menos, el pelotón tiró para adelante. Los dos amarillos y Dai consiguieron encontrar hueco para situarse pronto en cabeza. No pudo Casi conservar mucho tiempo el hueco que había abierto en la primera posición. Mato se quedó atascado en la pelea con Alex y Pedrós, y tardó más en remontar. Miguel-R y Capi ocupaban los dos primeros puestos, asediados por Dai, y Mato, más atrás, llegaba al cuarto puesto. Poco después Dai pasaba a Capi y se cebaba en Miguel-R, que tuvo que ocuparse más en tapar huecos que en ir rápido. Aquí llegó la gran labor de equipo del R5F1Team: Capi consiguió recuperar la segunda posición y frenó a Dai el tiempo suficiente para que Miguel-R obtuviera una buena ventaja marcándose varias vueltas por debajo de 32’’. Por detrás, a Mato se le salió un neumático y, sacando la calculadora, decidió aguantar en pista como fuera. No le salió mal, porque al final sólo perdió dos puestos, que cazaron su compañero Edu y un enorme Pedrós. El Piñote Team mientras tanto recibía su bautismo de fuego en pista haciendo honor a su nombre. En cabeza, a Miguel-R la carrera se le hacía eterna y Dai volvía a acercarse. Se vino abajo físicamente, y el de negro se alzó con la victoria. También se llevó el del BMW el punto extra por mejor marca, con un tiempo de 31:13, nuevo record (esta vez sí) de este circuito.
La clasificación por puntos quedaba temporalmente así: Miguel-R y Dai (13), Capi (6), Edu (5), Pedrós (4), Mato (3), sir Alex (2), Chechu (1) y Lamas y Casi (0). Tras un tiempo prudencial de descanso, en el que se aprovechó para reubicar la cámara-on-board, los pilotos se dispusieron a correr la ronda definitiva. Se volvía a correr en orden inverso, pero se pidió a Gonzalo, el comisario de pista, que asignara aleatoriamente nuevos coches a los pilotos. Todo estaba dispuesto para una nueva salida mortal. Al agitarse la bandera a cuadros, Mato se lanzó hacia el interior, rebasando a Edu. Miguel-R, que salía justo detrás, decidió seguirle, y ambos consiguieron remontar muchas posiciones antes de la segunda curva. Un toque anónimo desde atrás hizo trompear al de amarillo, dejándolo de pronto en última posición, y haciendo patente lo peligroso de estas salidas. Lamas, Casi y Alex tuvieron una salida limpia. Chechu, Edu y Pedrós perdieron la posición con Mato, que se lanzó como loco a por la victoria bajando de 32’’ desde la segunda vuelta. Dai y Capi no encontraron el hueco en las primeras vueltas, lo cual favoreció al aparentemente desahuciado Miguel-R. Todavía en la primera vuelta tuvo lugar un choque espeluznante que levantó el kart de Capi del asfalto. En la penúltima curva, a la salida de la chicane, en un choque múltiple en el que intervinieron Casi, Capi, Edu y Chechu, convirtieron al de Capi en un auténtico emparedado de chapa. La secuencia recogida por la cámara, y que publicaremos en breve, pone los pelos de punta. Como consecuencia de todo, uno de los amarillos pasó a la cola, con un coche tocado, que tuvo que cambiar poco después, y el otro remontó varios puestos de golpe esquivando la montonera. Mato seguía imparable hacia delante y sólo Lamas, mejorando sustancialmente sus tiempos hasta lograr bajar de 32’’, seguía en la brecha. Alex no aguantó la presión de Dai y del Hombre del Millón, y a su vez, Miguel-R, con la caña puesta detrás de éstos, encontró su oportunidad en una curva en la que el de rosa invitó amablemente al de negro a irse por el exterior. En este punto, la victoria final pasaba de negro a amarillo, pero aún podía pasar cualquier cosa. Claro que lo que pasó fue que Dai sufría el tercer llantazo del día y tenía que entrar en boxes a cambiar de coche. Al nuevo e inédito ganador del Campeonato sólo le quedaba apretar, y eso hizo, como atestiguan sus 19 vueltas por debajo de 32’’, una más que las 18 de Mato. A este último, su victoria en la segunda manga le sirvió para mantenerse en el cajón por quinta carrera consecutiva. Todo un récord. Lamas acabó en tercer lugar, evidenciando un gran progreso a pesar del moratón en la espalda que arrastraba desde la ronda de tiempos. Pedrós, con un pilotaje muy regular, llegaba cuarto, y más allá cruzaban la meta un competitivo Dai, que conseguía mantener el segundo puesto en el cajón a pesar de sus problemas mecánicos, Edu, con un coche lastrado por el cuarto llantazo del día, los del Piñote Team, y el emparedado Capi junto con Casi.
En este Gran Premio, todos los equipos puntuaron, así que la satisfacción era general, sobre todo en el R5F1Team, donde se curaban viejas heridas. Amor por Sato y Ralph Schumacher obtenía 10 puntos para la Clasificación de Equipos, así que salían muy airosos de una carrera con muchas incidencias mecánicas, lo mismo que en el equipo BMW. En otras habrá mejor suerte. También hizo un gran papel el compañero del Kartman llevándose el cuarto puesto. A los Kartone’s les falta continuidad, pero Lamas fue de menos a más y se llevó 2 puntos. Y un puntito para los debutantes, Piñote Team, que seguro darán que hablar en las próximas carreras.
Hay que agradecer a los dueños del circuito su flexibilidad en cuanto a horarios y forma de organizar el campeonato. El Castillo de las Guardas se consolida como uno de los circuitos indispensables en el Campeonato. En el precio iban incluidas tres botellas de champán y una consumición para cada piloto. Muchos se quedaron a comer allí mismo, y descubrieron, para culminar una jornada redonda, que hasta la comida era buena.