CuandoCorremos?

NO ESTABA MUERTO...

¿Se acuerdan de aquel trailer negro, chulísimo, en el que le hacían la revisión a KITT y del que nos bajábamos en marcha dando marcha atrás? Cómo fardaba dando haciendo la pirula en mitad de la carretera, porque yo siempre iba hacia el otro lado por puro espíritu rebelde. Bueno, pues por recortes en el presupuesto en la Fundación para la Ley y el Orden hemos tenido que echar al chófer y yo mismo me estoy teniendo que sacar el carnet C+E para vehículos articulados. Dos semanitas de teórico en unas caracolas junto al Estadio Olímpico y luego las prácticas. Ya si eso les aviso cuando salga a la carretera para que vayan con cuidado.

En estas cosas se va el tiempo mientras llega la última prueba del Campeonato. Ayer hablé con José Carlos, el ilusionado nuevo dueño del circuito, para ir concretando detalles. El Gran Premio costará 45 € por piloto. Por este precio lo que tienen previsto en principio es una prueba como la de Almancil: 15 minutos de entrenamiento y vueltas cronometradas, y 30 minutos de carrera. Como seremos más de 12 pilotos, tendrán que cambiarlo a una carrera con semifinales y finales. Y si por algún motivo al final fuéramos menos de 12, creo que podría hablar para que nos hiciéran dos mangas en lugar de una sóla carrera de 30 minutos. En cualquier caso les animo a que vayan ingresando los 45 € en el mismo número de cuenta que la última vez, porque tengo que pagar 100 € de fianza por la reserva.

Cambiando de tema, ayer salí a dar una vuelta con el Sr. Pedrós, para ver qué se contaba de su viaje en el Sudeste Asiático. Como supuestamente iba de mochilero, me preguntaba si habría sido éste uno de esos viajes iniciáticos que le cambian a uno la vida. Y la respuesta fue que no. Jesús sigue siendo exactamente el mismo de siempre: con gusto por la buena mesa, muy interesado en los atributos femeninos y fácil de enredar en las carreras de karts, todo lo cual pude confirmar en ese rato. Aparte de eso, sólo le pude sacar que prefiere los vídeos trucados con subtítulos del Terrible a los míos, y sospecho que no debe ser el único. Esa imagen de Briatore pensando en tías durante la entrevista no la voy a poder superar.

Pero la noche dio para algo más. Estando en un local de moda en la noche sevillana veía pasar entre la gente a uno que se parecía muchísimo al Sr. Almanzoide. Incluso se lo comenté al Sr. Pedrós. "Mira a ese, es increíble cómo se parece a Almanzoide. Es clavado". Bueno, pues tanto se parecía que al final resultó que era él. ¿Y qué hacía en Sevilla este cordobés de pro? No se lo van a creer: de despedida de soltero. Como decía esa rumba que puso precisamente el Terrible al final de otro de sus míticos vídeos: no estaba muerto, estaba de parranda.