OSTIAS COMO PANES.
La poco fiable mecánica del AxSyRS dejó la puerta abierta a un histórico doblete amarillo.
Había ganas de correr este fin de semana, eso nadie lo dudaba, pero tampoco podíamos imaginar el extremo nivel de agresividad desplegado por los pilotos de kartadas en el IV Gran Premio de Invierno, frenesí del que sólo se libró el primer triunfador del año, el deslastrado Cappi. Premonitoria la fotografía que nos regalo el Sr. Mato: "Al Amarillo, ni..."
Y qué decir del Tiempo. ¿Estamos bendecidos? Nos vimos obligados a cambiar de fecha la carrera, porque la fecha prevista ya está ocupada la pista... y día de perros para los que nos quitaron la pista y solazo para nosotros. De paso, como la pista estaba un poco mojada al principio, los muchachos tuvieron una primera toma de contacto con lo que significa realmente correr en mojado con neumáticos slip. Ya saben, para los amantes de las nuevas experiencias.
La notable ausencia del Kartman, que no pudo acudir a defender título, puede que animara a los que buscan su oportunidad, porque la participación fue excelente. 16 pilotos repartidos en 11 equipos. Ay, Pablo, te temen. El equipo amarillo estrenaba nuevo nombre, Fiebre Amarilla, y dábamos entrada, de prueba, al Brown Team de Conessa y Andrés. El BMW por fin traía compañero de fatigas y parece ir en serio esta vez en abandonar el grupo de los solteros.
Los valientes del día fueron los que salieron a pista en la primera sesión clasificatoria. Ahí empezaron algunos a competir... dando un pasito para atrás. Tú primero, compañero. Qué educación. Y los del "ya Boy George" se encontraron rodando con unos neumáticos helados sobre un asfalto gélido, con un estupendo charco colocado estratégicamente en la última curva. Uno detrás de otro, todos fueron recibiendo su ración de aquaplanning, para regocijo de los del pasito atrás, que hacían recuento de cuántos se habían estrellado ya contra los neumáticos. Hasta la quinta o sexta vuelta no empezó aquello a tomar temperatura, y poco a poco los pilotos le cogieron el truco a sobrepasar el charco sin matarse. Eso sí, con una pérdida de tiempo que no sería inferior al medio segundo. Miguel-R hizo finalmente el mejor tiempo, después de descansar un rato mientras lo rescataban de la montaña de protecciones a la que había montado el kart, tras entrar como un poseso en la curva ocho.
La pole se la llevó Mato, uno de los estrategas, sacando 31:23 del kart 31. El siguiente, a pesar de todo, fue Miguel-R (31:45) seguido de cerca por El Profesor (31:46), Dai (31:51) y Cappi (31:54). Javi (31:89) también bajó de 32", y más allá tuvimos al Terrible (32:22) y al animado Peter (32:28), junto al otro Trujillo, Juank (32:81) que va subiendo y a Mané (32:97) aprendiéndose la pista sin prisas. Almanzoide (33:02) no está en su mejor momento, pero marcó por delante de Ale Heinekennen (33:17), Conessa (33:33) Juan Pedro (33:52), el ToroRosso (33:78) y el novato Andrés (33:97). A los nuevos siempre les falta ritmo competitivo la primera vez.
La 1ª Semifinal tardó un poco en empezar porque al Estratega no le iba cómodo algo en el pedal del acelerador y hubo que esperar que se diera un vueltecita él solo para probarlo. Qué crack. No se quedó muy convencido, así que prefirió volver a correr con el 31, que le ofreció un ingenuo mecánico, más que nada por aquello de más vale bueno conocido. Se estiró rápidamente la carrera, una vez que Mato se puso en cabeza y exprimió toda la potencia del kart 31 hasta convertirse en el primero en bajar la barrera de los 31 segúndos. Cappi, segundo, cayó hasta la cuarta plaza trás planchar la oreja en el exterior de la curva 9. Pero la carrera estaba rota por detrás y nadie le estorbó para recuperar la plaza. El Terrible volvía a la élite ocupando la última plaza que daba acceso a la Final A, dejando fuera a Almanzoide, Juank, el Pedrós y Conessa.
Inmediatamente se dió salida a la 2ª Semifinal, que en principio parecía menos difícil. Sin embargo, Miguel-R, con la pole, no consiguió irse de Dai y Javi, con el peligro que eso conlleva. Puertas abiertas, interiores más o menos dudosos, cambios y más cambios de posición. Dai consiguió un hueco que le libraba de la bronca, y los otros dos siguieron estorbándose hasta que Javi pensó que sería buena idea que el de amarillo volviera a empotrarse en el exterior de la curva 8, donde tan a gusto pareció estar antes. Al de Fiebre Amarilla a punto estuvo de acabársele el Gran Premio, pero pudo poner de nuevo el kart en órbita antes de caer por debajo de la cuarta posición. El hueco en aquel momento (vuelta 9) ya era grande y sólo llegó Peter. Más tarde, el mayor de los Trujillo también se apuntó a la moda de tirar al blanco-amarillo en la curva 8, bautizada desde entonces como curva Amarilla. No pasó nada grave, y educadamente dejó paso como un señor, lo cual tuvo premio, como se verá más adelante.
Tras un muy necesario descanso, dada la elevada edad media de los participantes, comenzaron las Finales. En la Final B la atención estuvo dividida entre Almanzoide y Ale, muy escapados, y Mané y el ToroRosso, dos fuerzas de la naturaleza enfrascadas en un toma y daca de antología. Pasito a paso, Ale Heinekennen fue acercándose a Almanzoide. Se le hacían largas las 26 vueltas al de Aquí Hay Piloto. Perdía fuelle por momentos, y no le dio, por los pelos, para aguantar la primera plaza, que fue para Heinekkenen. El de rojo y el de morado, mientras tanto, dejaron que se acercaran otros lobos y se quedaron ambos sin la tercera plaza. Juank les robó la cartera, Pedrós entró cuarto, seguido de los tres nuevos y de Mané, al que imagino que le lloverían caricias por todas partes. La verdad es que no lo vi.
Sin tiempo para que Miguel-R montara correctamente la cámara-on-board, ya estaba montada la parrilla de salida de la Final A. Las primeras curvas fueron muy limpias, y nada hacía sospechar lo que se avecinaba. Mato y Cappi se iban nuevamente. Existe una extraña conexión entre estos dos, ya desde aquella lejana carrera de Cartaya 2008. Repasen las hemerotecas. Dai y Miguel-R, segundo y cuarto en el primer paso por meta, no participan de esa conexión, así que se les fue metiendo más y más gente en casa. Esa gente con ansia viva, como Javi, de la saga de los Amián, como El Profesor, piloto fino, o como el Terrible, con pólvora entre las manos. Adelantar o ser adelantado, comer o ser comido. Nadie esperaba ya al adelantamiento bueno. El más mínimo hueco fue interpretado como una ocasión válida y llegaron los empujones, los toques, los karts subidos totalmente a los pianos... No sé si hubo algún inocente, no lo creo. Destacable quizás el ansia del Terrible, que con el poder del 31 no quería dejar pasar ni un segundo en llegar a lo alto, y acabó entrando un poco colado en la 9, llevándose a Dai y no sé si a alguien más por delante. Miguel-R aprovechó el desastre para ponerse tercero y abrir el ansiado huequecito. También se coló por ahí Peter, llegando desde atrás, y ahí se quedó. Éste y el de amarillo miraban para adelante, y de pronto sólo veían a Cappi. ¿Dónde estaba el de azul?
El sobrealimentado kart del hamiltoniano Mato se atragantó de pronto de tanta gasolina y se vino abajo. Como loco, primero empujó con el cuerpo y las manos, luego decidió que quizás aporrear salvajemente el motor sería mejor idea, mientras Cappi le observaba entre asustado y compasivo, y luego tomó la decisión más salvaje: una entrada relámpago en boxes para cambiar de coche. Por poco atropella a los asustados mecánicos, pero volvió a pista, ya lo creo, y remontó hasta la tercera posición preso de un salvaje frenesí. Bravo, joder, bravo. Gracias por éstos momentos míticos.
De toda esta locura salió de algún modo el primer doblete de las kartadas, que se va para el equipo Fiebre Amarilla. El equipo a batir, no lo duden. Además, otros siete equipos puntuaron. En Amor por Sato y Ralph Schumacher puntúa sólo uno, pero todo les sabe a poco. BMW apuesta por preparar un segundo piloto puntero, pero como no tengan mejor suerte con la mecánica... Sube mucho el Trujillo Racing Team. En Aquí Hay Piloto pasan factura las noches locas, pero suma. También suman el Chupa Rueda, la Scuderia Birrari y La Curva lo Pedía, cuyo retorno a la élite vuelve a anunciarse. Es fundamental venir con compañero, señores, da un plus de competitividad. Sufrieron mucho la soledad, por ejemplo, en Si No Sabes Pilotar Paquete Metes y en Pierre Nodoyuna y Patán. También es duro ser novato, como han descubierto en el Brown Team, pero es temporal.
Esta vez me he alargando más aún de lo habitual, así que es el momento de despedirse rápidamente. Están todos invitados a dejar su propia versión del Gran Premio, y a venir al próximo, que si Dios quiere será allá por el lejano mes de junio en el espectacular Circuito de Almancil. Adios, cabrones.